Ha trascendido que en el búnker de Clara Brugada está incontenible la euforia y el optimismo ya que aseguran que el presidente Andrés Manuel López Obrador citó a Omar García Harfuch en sus oficinas del Palacio Nacional para pedirle al carismático exjefe policiaco de Claudia Sheinbaum un “gesto con la 4T” para hacer a un lado su candidatura al Gobierno de la Ciudad de México y cederle el paso a la ex alcaldesa de Iztapalapa, quien hace 14 años había recibido ya todo el apoyo también de AMLO para sustituir a Rafael Acosta Ángeles, el popular “Juanito”, para asumir la entonces jefatura delegacional en esa populosa zona del sur de la capital del país que alberga a más de un millón de habitantes. Por cierto, en esa ocasión, un factor clave para que el tabasqueño impusiera a Brugada fue Marcelo Ebrard, quien como Jefe de Gobierno de la CDMX propuso a la Asamblea Legislativa el nombramiento de la recomendada del tabasqueño para sustituir a “Juanito”, quien no alcanzó a cobrar ni una quincena. Como se recordará, el 11 de diciembre de 2009 fue designada jefa delegacional de Iztapalapa al ser aprobada la propuesta de Ebrard para que fuese nombrada sustituta de Acosta Ángeles, quien el día anterior se separó definitivamente de su cargo en medio del escándalo derivado de su presunta responsabilidad por la falsificación del acta de nacimiento que él había utilizado al registrar su candidatura por el PT, partido al que apoyaron López Obrador y Brugada luego de que ésta fuera desplazada de última hora de la candidatura del PRD por Silvia Oliva, tras un fallo del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación emitido 23 días antes de los comicios.